El verano puede ser una época complicada para nuestros perros. Y es que el calor intenso de estos meses, además de reducir el apetito y las ganas de moverse de nuestros amigos peludos, también puede tener consecuencias más graves (como un golpe de calor). Port tanto, a continuación, te dejamos algunos consejos para ayudarte a proteger a tu mejor amigo del calor veraniego.
¡Sigue leyendo para descubrirlos!
1. Mantenlo hidratado
Tu perro debe tener acceso a un bebedero con agua fresca y limpia a su disposición las 24 horas del día. Asegúrate que el bebedero no esté en pleno sol (el agua podría evaporarse con el calor, o calentarse de modo que el perro no quiera beber), recuerda comprobar frecuentemente que quede agua, y reponerla cuando sea necesario.
Durante los paseos, puede ser una buena idea llevar agua y un bebedero portátil, especialmente en zonas con poco o ningún acceso a fuentes o bebederos.
2. Helados caninos
En muchas tiendas de mascotas puedes encontrar helados para perros, que pueden ser un premio delicioso y refrescante. Otra alternativa es preparar "helados caseros", con un molde o contenedor de silicona, un poco de agua y unos granos de pienso. Esto, además, le proporcionará un juego que lo mantendrá un rato distraído. ¡Todo son ventajas!
3. Protégelo del sol
Es vital proporcionarle a tu peludo un lugar fresco y resguardado del sol donde descansar (sea dentro o fuera de casa), especialmente en las horas más calurosas del día.
4. Refresca tu espacio
Utilizar un ventilador o aire acondicionado para bajar la temperatura ambiental en casa es una medida que agradeceréis todos.
5. Mójalo
Si a tu perro le gusta el agua, una piscina para perros en la terraza o jardín (mejor si es a la sombra) puede ser una opción genial. Si no, mojarle un poco (sobre todo en la cabeza y el tronco) puede ayudarle a bajar su temperatura corporal.
6. Considera una cama o esterilla refrigerante
En verano, muchos perros prefieren descansar en el suelo, a menudo más fresco que su camita. En el mercado se pueden encontrar muchas camas que favorecen la dispersión del calor (como las camas levantadas del suelo o las que están hechas de un material transpirable) o incluso esterillas refrigerantes que ayudan al perro a mantener la temperatura corporal.
7. Córtale el pelo
Si tu perro tiene el pelo largo, recortarlo un poco (sobre todo en la zona de la barriga) puede ayudarle a pasar menos calor. Sin embargo, recuerda dejar una longitud de 2-3 cm, ya que el pelo también le protege del calor y el sol.
8. Cepíllalo
Un cepillado frecuente es vital para favorecer la muda y retirar el subpelo (manto de invierno para dar calor).
9. Evita los paseos en los momentos de más calor
Es importante sacar el perro a pasear en los momentos en los que hace menos calor y evitar que haga ejercicio intenso.
Consulta a tu veterinario para obtener más consejos sobre cómo podés ayudar a tu perro este verano.